El blog de Marc Bernabé

Tetsuwan Girl (La chica del brazo de acero)

Tuesday, July 23rd, 2013
  • Título: 鉄腕ガール –Tetsuwan Girl– (La chica del brazo de acero)
  • Autor: Tsutomu Takahashi
  • Editorial: Kōdansha
  • Revista: Morning
  • Años publicación: 2000-02
  • Clasificación: deportivo, histórico
  • Tomos: 9

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Hubo un tiempo en el que me encantaban las obras de Tsutomu Takahashi, justo cuando el director de cine Ryūhei Kitamura, que también me gustaba mucho en su momento por su estilo “cool” y “slick”, adaptó para la gran pantalla dos películas basadas en mangas de este autor: Alive y Sky High.

Sky High, en particular, me pareció una gran obra. Los mangas de Takahashi me llamaban la atención por su dibujo, que me parecía muy atractivo a la vista, pero también por su argumento, bastante rápido, trepidante y bien llevado. Nunca he leído nada de su primera obra Jiraishin, muy famosa en Japón, aunque sí la he ojeado un poco y puedo decir que el estilo de dibujo de Takahashi dio un salto bestial entre el principio de esta obra (muy típico “manga”, con bastante poca personalidad) y su final (donde ya encontró el estilo que le define actualmente).

De Tsutomu Takahashi leí también, en su momento, la obra Blue Heaven, y empecé con Bakuon Rettō (El archipiélago del estruendo), aunque ya en esta última fue cuando me desencanté un poco, ya que no consiguió engancharme y el estilo de dibujo (sobre todo la manía de dibujar los ojos de ciertos personajes como si estuvieran fuera de sus órbitas, que empezó a cultivar sobre esta época) empezó a echarme un poco para atrás.

La siguiente obra que seguí suya, aunque esta ya por motivos profesionales, fue Sidooh, que personalmente no llegó a fascinarme. Sí me gustaba el marco histórico en el que estaba ambientada, y los personajes históricos que de vez en cuando aparecían en ella, pero si hubiese tenido que seguirla por hobby no habría pasado de los 3 o 4 primeros tomos. De hecho, a pesar de haber quedado descatalogada recientemente por culpa del “shueishazo”, no me he decidido a leer los 4 tomos que quedan para finalizar (se tradujo hasta el 21 de un total de 25) a pesar de que tengo acceso al original japonés y de hecho tengo los tomos en mi casa. Después de Sidooh, no me ha llamado la atención su nueva obra, Hito Hitori Futari, aunque no descarto probar con ella algún día.

¡Chicas y béisbol!

¡Chicas y béisbol!

Tetsuwan Girl, la historia que reseño en esta ocasión, es una de las de la primera época de este autor, y recuerdo perfectamente que compré de segunda mano los 3 primeros tomos porque me encantó el detalle de la sobrecubierta “recortada”. A veces me pasa que compro un manga no tanto porque me llame la atención el contenido, sino porque tiene una edición más o menos llamativa u original. Y lo cierto es que este manga me pareció peculiar pero me gustó bastante y hace poco he tenido la oportunidad de releerlo.

Estamos a finales de los años 40, la derrotada nación japonesa sigue ocupada por el ejército americano y las tropas yanquis frecuentan lugares de alterne con chicas. La atractiva, arisca y atrevida Tome Kanō es una de estas chicas. Un buen día, llega un hombre al local en el que trabaja y les propone un “trabajo” muy lucrativo: solo hace falta que se presenten tal día a tal hora en tal sitio para que les paguen un buen pellizco. Y, por supuesto, ellas se apuntan.

El sitio al que acaban yendo resulta ser un campo de béisbol. Allí, les dan uniformes y les dicen que tendrán que disputar un partido de exhibición contra otro equipo porque están pensando crear una liga profesional de béisbol femenino. Las “Candys” (sic.), así se llaman, caen contra las “Strikes”, pero Tome se revela como una prometedora pítcher. Aunque ese debía ser su primer y único partido con las Candys, Tome le cae en gracia a una promotora, que posteriormente la contrata para el equipo, uno de los que formarán parte de la primera liga de béisbol femenino profesional de Japón.

Como podéis ver, es una historia deportiva con tintes históricos, ya que la ambientación es muy “años 50 japoneses”. Aunque ciertamente resulta difícil de creer porque las circunstancias de la mujer en los años 50 era complicada en Japón y me parece impensable que ellas jugaran al béisbol (y menos profesionalmente), la historia se sostiene bastante gracias al dinámico ritmo que impone Takahashi, y a su estilo de dibujo, que, personalmente, me atrae mucho.

Lo mejor

  • El trepidante ritmo.
  • El dibujo.
  • El argumento es bastante adictivo.

Lo peor

  • La premisa en la que se basa me resulta poco creíble.

Captain Tsubasa Kaigai gekitō-hen En la Liga (Capitán Tsubasa / Luchas intensas en el extranjero / En la Liga)

Wednesday, February 13th, 2013
  • Título: キャプテン翼 海外激闘編 En la Liga –Captain Tsubasa Kaigai gekitō-hen En la Liga– (Capitán Tsubasa / Luchas intensas en el extranjero / En la Liga)
  • Autor: Yōichi Takahashi
  • Editorial: Shūeisha
  • Revista: Young Jump
  • Años publicación: 2010-12
  • Clasificación: deportivo, fútbol
  • Tomos: 6

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De sobra conocemos a Tsubasa Ōzora y sus compañeros Kojirō Hyūga, Genzō Wakabayashi y compañía, más conocidos entre los no aficionados al manganime como Oliver Atom y sus compañeros Mark Lenders, Benji Price y compañía. Lo que no tanta gente sabe es que las aventuras de esos niños futboleros siguen hoy en día en el marco del manga de la mano de su autor Yōichi Takahashi.

Tras la historia original (Captain Tsubasa, 1981-88, que es la que conocemos aquí por su versión animada: Campeones / Oliver y Benji), Takahashi ha realizado varias otras sagas continuando la historia: World Youth (1994-97), Road to 2002 (2001-04), Golden 23 (2005-08), In Calcio (2009) y la más reciente, En la Liga (2010-12), que es la que reseño en esta ocasión.

Nuestros personajes tienen ya veintipico años e incluso Tsubasa/Oliver está casado con su novia de toda la vida y espera un hijo. En la serie Road to 2002, Tsubasa fichaba por el Barça mientras Kojirō Hyūga/Mark Lenders se iba a la Juventus (y los demás personajes también fichaban por varios clubes de todo el mundo). Aunque los inicios de Tsubasa en el Barça no fueron muy brillantes debido a la competencia de la estrella del club Rivaul, por lo que fue relegado al Barça B durante unos cuantos partidos, por fin se gana la titularidad. Por su parte, Hyūga tiene bastantes problemas en la Juventus, por lo que es cedido al Reggiana, de la Serie C, equipo al que ayuda decisivamente a ascender a la Serie B.

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¡El barcelonista Tsubasa contra el madridista Natureza!

Todo esto nos lleva al escenario dibujado en este En la Liga, la saga más reciente de la serie que narra las aventuras de Tsubasa Ōzora y sus amigos. Tras una importante lesión de Rivaul, la estrella del Barça, Tsubasa se erige como el gran líder del equipo, hasta el punto de contribuir muy decisivamente en la victoria en el Camp Nou contra el gran rival, el Real Madrid, por 6 a 5. Ahora estamos ya en la segunda vuelta de la liga y el Barça debe enfrentarse al Madrid en un nuevo Clásico, pero esta vez en el Santiago Bernabéu. Pues bien, los 6 tomos de esta saga son ni más ni menos que la representación en manga de este único partido, un partido épico en el que el Barça, con jugadores como Rivaul, Payol, Xavi o Valdez, se enfrentará al Real Madrid de Natureza, Roberto Carolus, Marientos, Raíl, Fago y compañía.

Tras terminar En la Liga en 2012, Yōichi Takahashi no ha vuelto todavía a empezar ninguna nueva saga. Nos preguntamos qué tema enfocará en el futuro y si por fin se decidirá a dibujar lo que siempre ha sido considerado el broche de oro de la serie: cumplir el sueño de Tsubasa y sus compañeros de levantar la Copa Mundial para la selección de Japón.

Lo mejor

  • Trepidante encuentro muy en la línea de la obra.
  • Conocer la evolución posterior de esos pequeños futbolistas que tantas pasiones despertaron en mi adolescencia temprana.
  • Que Tsubasa juege en el Barça.

Lo peor

  • ¿Seis tomos enteritos para narrar un solo partido? Fiu.
  • Parece que Yōichi Takahashi ha ido perdiendo el sentido de la proporción a lo largo de los años, porque dibuja a futbolistas con enormes cuerpos, casi gigantescos, y cabezas diminutas. La verdad es que es bastante feo.
  • Los personajes que juegan en el Barça y el Madrid aparecieron por primera vez en Road to 2002, que empezó en el año 2001. El paso del tiempo y la “lentitud” en el mundo del manga han provocado que muchos de los nombres (Rivaul-Rivaldo, Raíl-Raúl, Fago-Figo, Payol-Puyol) suenen realmente desfasados, aparte de que los cambios de nombre para evitar problemas de copyright son muchas veces ridículos.
  • Es muy difícil ver este manga publicado aquí. Primero porque Shūeisha tradicionalmente ha exigido que, antes de publicar nada “moderno” de la saga, se debe empezar por el principio (y Glénat siempre dijo que el manga original les vendió muy mal, de ahí que no continuaran con World Youth). Y segundo porque en el manga se usan equipamientos, escudos y logos reales que tal vez provoquen muchos problemas, puede que insuperables, en forma de pedir permiso a los diferentes equipos y marcas deportivas para usarlos fuera de Japón en este manga.

Cross Game

Friday, January 11th, 2013
  • Título: クロスゲーム –Cross Game–
  • Autor: Mitsuru Adachi
  • Editorial: Shōgakukan
  • Revista: Shōnen Sunday
  • Años publicación: 2005-2010
  • Clasificación: deportivo, comedia romántica
  • Tomos: 17

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Siguiendo mi particular “festival Mitsuru Adachi”, tras Touch (me encantó), MIX (me está gustando), Idol A (me dejó más bien frío) y Miyuki (¡me encantó!), le di la oportunidad a Cross Game tras las reiteradas y efusivas recomendaciones de más de un seguidor de Twitter.

La verdad es que el manga me ha gustado, he disfrutado mucho de su lectura, que me parece fresca, muy rápida y con esa manera maravillosa que tiene Adachi de narrar, de decir mucho con pocas palabras, solo con algún gesto sutil (y eso que su estilo de dibujo es más bien simple).

Sin embargo, Cross Game, a pesar de que me ha gustado, no lo he disfrutado tanto como otras obras porque se centra muchísimo más en el tema deportivo beisbolero que, por ejemplo, Touch. Si la temática fuera el fútbol, o el baloncesto, seguramente habría disfrutado mucho más este aspecto. Si bien tengo conocimientos de béisbol, son nociones bastante superficiales y entiendo más o menos cómo funciona un partido de béisbol y sus reglas aproximadas, pero Adachi va mucho más allá y representa sobre el papel jugadas muy sutiles, con su estilo habitual. Si has mamado béisbol desde pequeño (el público de Adachi es así, no en vano el béisbol sigue siendo el deporte rey en Japón), entenderás enseguida y te emocionarás con algunas jugadas que deja en el aire (dejando que sea el lector quien deduzca, de forma inmediata e instintiva, quién ha hecho qué jugada y qué ha representado). Sin embargo, si tus conocimientos son limitados, como es mi caso, te perderás en algunas situaciones. Aun así, la historia obviamente se deja seguir y algunos partidos resultan muy emocionantes.

Cross Game cuenta la historia de Kō Kitamura desde su infancia (10-11 años) hasta el último año de instituto (17 o 18 años). Kō es un chico bastante normal, pero tiene un don para el béisbol (que al principio tampoco se esfuerza en desarrollar, por cierto) y una gran amistad con las cuatro hermanas Tsukishima: Ichiyo (mayor), Wakaba (misma edad que Kō), Aoba (un año menos) y Momiji (pequeña), especialmente con Wakaba. De hecho, si no fuera por la corta edad que tienen al principio del manga, se diría que Kō y Wakaba son novios, por lo fantásticamente bien que se llevan y el cariño que se profesan. Aoba, sin embargo, es la típica tsundere, borde y arisca como ella sola cuando tiene a Kō delante.

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¡Romances low-hi y béisbol koshienista!

Al final del primer tomo ocurre un “evento adachiano” por excelencia: Wakaba fallece en un accidente, no sin antes decirle a Kō y a Akaishi (un chaval bastante feíto, pobre, pero que está perdidamente enamorado de ella) que la noche anterior había tenido un sueño en el que Kō estaba como pítcher y Akaishi como catcher en un estadio Kōshien repleto de gente.

Así, tras la muerte de Wakaba, Kō y Akaishi se conjuran para hacer realidad ese sueño, y procuran tirar del club de béisbol de su instituto, el Seishū Gakuen, a lo largo de los años de secundaria y bachillerato. ¿Conseguirán llegar al Kōshien, el legendario estadio donde se celebra la fase final del torneo nacional de béisbol de institutos de Japón, sueño de todo chaval beisbolista nipón, o se quedarán por el camino, derrotados por alguno de los muchísimos equipos que participan en las fases preliminares regionales?

Por otra parte, ¿qué es ese rollito que se lleva Aoba con Kō? Tan arisca y hostil, pero por otro lado hay “algo” ahí detrás… ¿Y con los demás personajes secundarios que, como en toda obra adachiana, aparecen disputándose (y a veces “conquistando”) el amor de los personajes protagonistas, como el atractivo Azuma o la dulce Akane?

Lo mejor

  • El típico manga adachiano que se deja leer con gusto, velocidad y ganas de saber qué pasará.
  • El rollito amoroso, también tan típico de Adachi.

Lo peor

  • Demasiado béisbol para mi gusto.
  • El final me decepcionó un poco, esperaba un poco más de desarrollo. No es un mal final, en absoluto, pero yo personalmente esperaba otra cosa.

Gurazeni

Wednesday, October 31st, 2012
  • Título: グラゼニ –Gurazeni–
  • Autor: Yūji Moritaka (guión) y Keiji Adachi (dibujo)
  • Editorial: Kōdansha
  • Revista: Morning
  • Años publicación: 2011-?
  • Clasificación: seinen, alternativo, deportivo
  • Tomos: 7 (en curso)
 

A pesar de que los obras ambientadas en el mundo del béisbol no son de las que a priori más me atraen, decidí darle una oportunidad a este manga después de verlo a menudo en las listas de “las mejores obras de 2011” (por ejemplo, está segundo en la lista de la publicación de referencia Kono Manga ga Sugoi! 2012) o incluso como nominado a mejor obra en certámenes como el premio Manga Taishō.

El título, Gurazeni, es una contracción de la frase “guraundo ni zeni ga umatteiru”, es decir, “el dinero está enterrado en la cancha”, y cuenta la historia de un jugador de béisbol en un equipo de la primera división japonesa. Lo que es peculiar en este caso es que el jugador en cuestión, Natsunosuke Bonda, no es el mejor bateador ni el mejor pícher, ni tampoco tiene que batirse con los demás para llegar a ser el número uno. No, Bonda es un jugador del montón, ni muy bueno ni muy malo, y hace de pícher. Ha llegado a profesional, pero justito, y realmente lo único que le distingue es que es zurdo, lo que hace que pueda llegar a ser útil en ciertas circunstancias del juego.

Para Bonda, todo gira alrededor del dinero y todo lo valora según los salarios que cobran sus rivales en comparación con el suyo. Si sabe que se va a enfrentar a uno que cobra menos dinero, entonces psicológicamente se crece y piensa que “en ningún caso voy a dejarme vencer por este”, pero si el bateador es de más categoría se arruga un poco.

Bonda esforzándose por ganarse su sueldo

Es una historia muy del día a día en el mundo del béisbol profesional, realista en el sentido de que lo pinta como una profesión más. Las motivaciones de Bonda se basan en hacer buen papel para que, en la temporada siguiente puedan llegar a subirle el sueldo, un sueldo que está muy por encima de la media de los asalariados japoneses medios, cierto, pero en una profesión que tiene una “fecha de caducidad” obvia. Entre los 35 y 40 años, uno acaba retirándose del béisbol (cuando no tiene que dejarlo prematuramente por una lesión) y, entonces, ¿qué queda…? Los más afortunados se meten a comentarista televisivo o radiofónico pero, eso sí, por una fracción del sueldo que percibían como beisbolistas.

Por eso Bonda procura ir con prudencia pero con paso seguro, para ahorrar lo máximo posible en preparación para ese momento en el que tenga que retirarse e incorporarse a la sociedad normal. Porque, a riesgo de repetirme, cuando un beisbolista del montón se retira, a los 35 o 40 años… ¿Qué hace?

Lo mejor

  • Una premisa interesante y muy original.
  • Aprendes bastante sobre cuestiones del béisbol profesional japonés que en ningún otro manga explican.

Lo peor

  • El dibujo no es muy llamativo.
  • El argumento, aunque está bien, no ha terminado de engancharme, imagino que debido a que el béisbol japonés me importa más bien poco.

Haikyū!! (¡¡Voleibol!!)

Wednesday, September 26th, 2012
  • Título: ハイキュー!! –Haikyū!!– (¡¡Voleibol!!)
  • Autor: Haruichi Furudate
  • Editorial: Shūeisha
  • Revista: Shōnen Jump
  • Años publicación: 2012-?
  • Clasificación: deportivo (voleibol)
  • Tomos: 3 (en curso)

Después de haber analizado las dos series empezadas y ya terminadas en los últimos meses en la Shōnen Jump, Pajama-na kanojo y Sensei no Bulge, sigo con este repasito de las series empezadas en los últimos meses y que, a día de hoy, siguen en publicación en la revista más influyente del cómic mundial.

Haikyū!! es una serie bastante del montón, al menos de momento, pero para mí es especial porque es la primera con la que empecé a seguir la Jump semana a semana. Al no disponer de tiempo, decidí que solo seguiría las series que empezaran desde el capítulo 1, y que las antiguas pues simplemente las pasaría y así, conforme fuera pasando el tiempo, iría leyendo cada vez más proporción de la revista a medida que fueran acabando las series en curso. Actualmente, unos 6 o 7 meses después de haber empezado, calculo que estaré leyendo aproximadamente el 50% de cada número, lo cual no está nada mal y da una pista de la fuerte rotación que hay en la revista, donde salvo las “intocables” (KochiKame, One Piece, Naruto y Bleach, seguidas por Reborn, Toriko, Medaka box y Kuroko no basket), cualquiera puede caer.

La palabra haikyū, escrita en kanji (排球), es la denominación “antigua” o “japonesa cañí” del deporte del voleibol, al que actualmente todo el mundo llama バレーボール (bareebooru, es decir, “voleibol” pronunciado a la japonesa). Supongo que titular simplemente “Voleibol” a su obra no le gustaba al autor, y que usar los kanji de la denominación antigua se percibe como “rancio”, así que al final lo escribió en katakana, añadió un par de signos de exclamación, y tira millas: ハイキュー!! (Haikyū!!)

Como no puede ser de otra manera, este es un manga deportivo centrado en el mundo del voleibol, un deporte bastante popular en los últimos años en Japón entre la población masculina, gracias al buen papel de la selección japonesa en los distintos torneos internacionales (en los últimos años, campeones de Asia en 2005 y 2009) y al hecho de que Japón alberga los mundiales de voleibol, tanto femeninos como masculinos, desde 1977 (una edición cada cuatro años). Antes he especificado “entre la población masculina” porque ya sabéis que, en los años 60-80, hubo un enorme boom del voleibol femenino gracias a mangas/animes como Attack No. 1 o Attacker You! (Juana y Sergio). Por eso, podemos decir que la pasión masculina por el voleibol es relativamente nueva.

¡Dale, Hinata!

La historia nos narra las peripecias de Shōyō Hinata, un auténtico apasionado del voleibol, desde un poco antes de entrar en el instituto de sus sueños: el Karasuno. Hinata había estado obsesionado con este instituto desde que vio jugar a su equipo de voleibol años atrás. Ahora, sin embargo, el Karasuno ha perdido gran parte de su antiguo esplendor, pero eso no es impedimento para que en su seno haya buenos jugadores, a los que se sumarán el propio Hinata, que a pesar de su baja estatura tiene una potencia de salto increíble, y el díscolo Kageyama, el típico borde que es muy buen jugador pero también es muy individualista y nadie lo traga.

Poco a poco iremos introduciéndonos en el día a día del Karasuno y aprenderemos, junto a Hinata, las distintas normas y convenciones del voleibol. ¿Hasta dónde conseguirá llegar el equipo del Karasuno?

Estamos ante un manga deportivo bastante al uso. A mí personalmente no termina de engancharme y en varias ocasiones he estado a punto de dejarlo. Sin embargo, como quien no quiere la cosa lo he ido siguiendo y la verdad es que poco a poco va despuntando. No sé si durará mucho en las páginas de la exigente Shōnen Jump, pero de momento parece que va aguantando el tipo y hasta le van dando de vez en cuando páginas a color, señal de que no funciona mal precisamente.

Lo mejor

  • Está sabiendo aguantar el tipo.
  • Las explicaciones tácticas y sobre las normas del voleibol ayudan a los profanos a orientarse.

Lo peor

  • A veces resulta un poco aburrido.
  • El dibujo de las caras, así como achatadas, se hace extraño, al menos a mí.