El blog de Marc Bernabé

Nihon Chinbotsu (El hundimiento de Japón)

  • Autor: Sakyô Komatsu (historia original) / Tokihiko Ishiki (manga)
  • Editorial: Shôgakukan
  • Revista: Big Comics Spirits
  • Años publicación: 2006-?
  • Clasificación: seinen
  • Tomos: 13 (en curso)

Menuda semanita llevo… ¡Buf! En fin, es lo que tienen los “previajes” (que el sábado me voy otra vez al Japón de mis amores, ¡yujuuu!) Ya hablé un poco sobre Nihon Chinbotsu en el post de Taiyô no Mokushiroku. Se trata de una novela apocalíptica escrita en 1973 por Sakyô Komatsu en la que se narra un enorme desastre telúrico que destroza el archipiélago japonés y provoca que quede prácticamente sumido bajo las aguas. La novela contó con una versión cinematográfica aquel mismo año (1973), y recientemente, en 2006, se hizo un remake que ha llegado a España de la mano de Selecta Visión (aunque creo que solo está disponible en alquiler, al menos de momento) con el título El hundimiento de Japón. Si os gustan las historias apocalípticas, esta película es muy recomendable: es espectacular y está muy bien hecha (aunque en el plano argumental e interpretativo tampoco es muy destacable, pero bueno, se le perdona).
Lo que no es tan conocido es que, al igual que existen dos versiones cinematográficas de la novela, también existen dos versiones manga. La primera fue realizada por el estudio del gran Saitô Takao (Golgo 13, Survival, Breakdown...) en los años 70 y la segunda es esta que comento ahora, que empezó en 2006 en la revista Big Comics Spirits y sigue en publicación con 13 tomos en el mercado. Evidentemente, las dos versiones manga aprovecharon para chupar rueda del éxito de ambas versiones cinematográficas.
El nuevo manga de Nihon Chinbotsu, obra de Tokihiko Ishiki, me ha sorprendido por la sencilla razón de que el primer tomo (el único que he leído) no es más que un enorme prólogo. Me explico: primero se nos presenta a los personajes principales (Onodera, el piloto de submarinos de alta profundidad; Reiko Abe, la miembro del grupo de rescate especial de los bomberos; y Tadokoro, el científico pirado que resulta ser el agorero que adivina por primera vez el peligro que corre el país y trata de avisar a las autoridades, que al principio no le hacen ni puñetero caso). Y luego se les sitúa a todos en un restaurante situado en la planta baja de un edificio de varias plantas bastante vetusto de Tokio. Está haciendo un calor infernal en Tokio a pesar de ser pleno invierno, y en los alrededores del edificio en cuestión hasta cantan las cigarras (que en Japón solo aparecen en los meses de verano). El profesor Tadokoro, con sus datos y peregrinas teorías, piensa que allí va a ocurrir algo extraño y, efectivamente, la mesa en la que se habían sentado… ¡De golpe se la traga la tierra!
 

¡Que se desploma el edificio!

Así, empieza a haber temblores y el edificio entero empieza a hundirse en la tierra. El fenómeno parece afectar únicamente a ese edificio, que poco a poco se va retorciendo y hundiendo. Tras desalojar el bloque y sufrir varios peligros, solo una profesora de guardería y un niño quedan en el mismo, en la planta superior, pero no pueden bajar porque las escaleras han quedado inutilizadas. Así, Reiko y los demás tratarán de salvarles llegando a ellos a través de uno de los edificios contiguos. En fin, casi todo el primer tomo está ocupado por esta trepidante aventura que en la película ni siquiera aparece (ignoro si en la novela original aparece, eso sí).
Esto hace pensar que estamos ante un manga pensado para durar muchos tomos -estirando como un chicle la historia original e inventándose numerosos excursus en el devenir de su argumento- y en el que prima la acción y la aventura por encima de todo lo demás. Efectivamente, dos años después de su inicio, el manga sigue publicándose y acumula ya 13 volúmenes.
A ver, es un manga entretenido, no voy a decir que no, y el hecho de que se publique en una revista seinen y que use recursos narrativos y gráficos muy “seinen”, ayuda bastante a elevar su grado de interés. Pero, por otro lado, esa manera de estirar el chicle de la historia original, una novela legendaria en Japón, no termina de gustarme. Como manga, eso sí, se deja leer bastante bien y tiene un dibujo que no está mal. Un día de estos intentaré hacerme con el primer tomo del Nihon Chinbotsu de Takao Saitô para comparar ambos mangas, a ver qué tal.

Illumination no yoru 23:59 hatsu (Noche iluminada, salida a las 23.59)

  • Título: 電飾の夜23:59発 –Illumination no yoru 23:59 hatsu– (Noche iluminada, salida a las 23.59)
  • Autor: Hisashi Sakaguchi
  • Editorial: Tôkyô Sanseisha
  • Revista: Varias
  • Años publicación: 1983
  • Clasificación: seinen
  • Tomos: 1

Después de quedarme anonadado con Ikkyû e Ishi no Hana (Partisan), me entró la curiosidad por conocer mejor la obra de Hisashi Sakaguchi y decidí agenciarme más obras de su lamentablemente corta producción (tenéis más detalles en el post sobre Ishi no Hana – Partisan). Así, hace poco pude conseguir Version (que todavía no he empezado a leer, aunque es relativamente conocida en España por haber sido publicada parcialmente a finales de los 90 por Glénat) y este tomo único de Illumination no yoru 23:59 hatsu.
Como decía en el post de Partisan, Sakaguchi no se liaba mucho con obras muy largas (las únicas largas son Ikkyû (4 tomos), Partisan (6 tomos) y Version (3 tomos)), así que hasta cierto punto se especializó en historias cortas, muchas de las cuales se recopilaron en forma de tomo. Actualmente, la mayoría de ellas están disponibles en la colección de 5 tomos Sakaguchi Hisashi Tanpen-shû. Pero cuidado, porque esta colección fue publicada por Chikuma Shûhan-sha, una editorial que quebró en diciembre de 2007, con lo que estos tomos cada vez serán más complicados de conseguir, hasta que finalmente se agoten.
Tenía mucha curiosidad por ver cómo se desenvolvía el maestro Sakaguchi en la narrativa corta, así que, ni corto ni perezoso, conseguí este tomo editado en 1983 por la pequeña editorial Tôkyô Sanseisha. Al haber sido publicado en 1983, lógicamente todas las historias fueron dibujadas antes de esta fecha y por lo tanto se enmarcan en la etapa más primeriza del Hisashi Sakaguchi mangaka. Así, aunque algunas de las historias ya tienen el dibujo depurado del Sakaguchi más maduro, otras tienen un dibujo más tosco, propio de un dibujante primerizo.

En cuanto a las historias en sí, la verdad es que tienen un nivel bastante variable, aunque todas ellas, sin embargo, tienen contenidos bastante “filosóficos” o directamente raros, típicos del autor. El tomo recopila un total de siete historias cortas de longitud variable. Por ejemplo, la historia que abre el libro y que le da título, Illumination no yoru 23:59 hatsu, ocupa 74 páginas, mientras que la segunda, Symphonyyy, es de solo 4 páginas. Realizaré una reseña corta de cada historia:

La inquietante momia de la historia que da título al libro
  • Illumination no yoru 23:59 hatsu. Historia que abre el libro y le da título. Muy inquietante y bien llevada. Nos cuenta la historia de un chico obsesionado con la tesis de graduación de la carrera, que acaba cayendo en una peligrosa paranoia tras encontrar en una playa una especie de momia de extraña forma.
  • Symphonyyy. Con solo cuatro páginas sin texto, nos presenta una especie de baile de marionetas.
  • Kanon. En el año 301 de la era espacial, a los criminales se les da dos opciones: pudrirse en la cárcel o ceder su cerebro para que, sin perder su conciencia, su carácter ni sus recuerdos, sea colocado en cuerpos robóticos que serán enviados a las colonias espaciales para realizar tareas de vigilancia y dirección de los peones (máquinas simples gobernadas por cerebros sin conciencia arrancados de bebés con el consentimiento de sus padres).
  • Shinka (Evolución). Otra historia de ciencia-ficción que nos narra la exploración de un planeta inquietantemente parecido a la Tierra… Pero que guarda desagradables sorpresas.
  • Natsuyasumi (Vacaciones de verano). Experimento lisérgico que, con escenas fantásticas y dibujo distorsionado, cuenta el viaje en autobús de una niña al término de sus vacaciones de verano.
  • Rokugatsu no ame (Lluvia de junio). Otra extraña historia con la lluvia como protagonista. Muy poética.
  • Ruten (Cambio constante). Otra historia de ciencia ficción, muy corta (4 páginas), muda y también muy poética.

El tomo se completa con un interesante cuestionario al autor, una completa lista de su obra como mangaka hasta 1983, una especie de entrevista, un errático epílogo escrito por el propio Sakaguchi y otro epílogo escrito por un amigo suyo. Unos complementos muy interesantes para conocer más de cerca este enigmático y malogrado autor.

Dorohedoro

  • Título: Dorohedoro
  • Autor: Q Hayashida
  • Editorial: Shôgakukan
  • Revista: Ikki Comix
  • Años publicación: 1999-?
  • Clasificación: seinen
  • Tomos: 12 (en curso)

Mira que hay mangas raros por ahí; pues este es uno de ellos, una de estas bizarradas estrambóticas alternativas-experimentales que normalmente no suelen terminar de gustarme, pero que esta vez me tiene enganchado: Dorohedoro, obra de Q (Kyû) Hayashida. Se publica en la Ikki de Shôgakukan, una revista de cómic alternativo que casi podría considerarse una especie de Garo de la era moderna, donde publicó por ejemplo el gran Matsumoto Taiyou (autor de Tekkon Kinkreet) y publica actualmente Daisuke Igarashi (Hechiceras), además de ser el hogar de obras como mi adorada Kingyo-ya Koshoten o las conocidas en España Freesia y Sexy Voice and Robo.
Ya no recuerdo cuándo empecé a adquirir los tomos de Dorohedoro, pero hace ya bastantes años, y desde entonces he ido siguiendo la serie regularmente hasta que recientemente he leído el tomo 12, publicado a finales de septiembre en Japón y por lo tanto el último disponible de momento. Si compré el primer tomo de Dorohedoro fue simplemente porque me encantó su portada, aquí no hay misterio. Aparte de ser un libro de tamaño grande aunque bastante finito, la portada tiene un efecto en relieve que la asimila a las escamas de un reptil. Este efecto tan curioso, junto con el llamativo dibujo del protagonista en la portada, me llamó tanto la atención que no pude hacer otra cosa que llevármelo a casa.
Al abrir el libro, uno puede decepcionarse si se espera disfrutar de un gran arte: porque el dibujo es más bien sucio y feísta, y los personajes son muy estáticos. Tampoco nos engañemos: Hayashida no es un gran dibujante. Pero aun así, este dibujo sucio se combina con un argumento rarísimo en el que no falta el gore y las situaciones más descabelladas, junto a pinceladas de humor negro estrafolario. El autor dice en un texto que he encontrado en la web de Ikki, literalmente “Este manga nació a partir de la inspiración que recibí de cierta canción. Esa canción tenía unas letras horriblemente oscuras y violentas, pero la melodía era tan alegre que casi hacía que uno se pusiera a bailar. Así que cogí esta idea, la combiné en forma de cómic con otras cosas que me gustan, y así surgió lo que es Dorohedoro en la actualidad”. Yo, francamente, no lo habría dicho mejor. ¡Precisamente esto es lo que es Dorohedoro!
Se va el caimán, se va el caimán… XDDD

A este paso no os voy a contar el argumento. A grandes rasgos, es así: he aquí un mundo imaginario donde existen dos dimensiones (bueno, en realidad son más, pero de momento quedémonos con la idea de las dos); en una dimensión viven los “magos”, unos tipos que, mediante unos conductos internos de su cuerpo pueden generar una especie de “humo” con los dedos o la boca. El humo mágico surte distintos efectos: por ejemplo, uno de los personajes puede transformar en seta cualquier cosa que desee; hay otro capaz de resucitar a los muertos; otro cuyo humo corta en rodajas a todo lo que toca; otro que cura, etcétera. En la otra dimensión, una ciudad llamada “Hole”, vive gente normal y corriente, aunque sufren la tortura de los magos. Porque los magos pueden ir y volver de “Hole” mediante unas puertas muy similares a la de Doraemon (XD); y una vez en Hole, se dedican a hacer experimentos con su humo contra los pobres humanos.
Así, en Hole vive gente muy deforme, como el protagonista de la historia, Kaiman, un hombre al que algún mago le lanzó un humo que convirtió su cabeza en la de un caimán y en el proceso le borró la memoria. Además, en las profundidades de la garganta de Kaiman se esconde una cabeza humana viva cuya identidad nadie conoce (¿es la cabeza original de Kaiman?). En fin, la premisa de la historia es que Kaiman quiere recuperar su memoria, volver a ser normal y de paso cazar y vengarse del mago que le convirtió en monstruo. Él y Nikaidô, la cocinera y propietaria de un restaurante al que Kaiman va habitualmente a atiborrarse de gyôza, se meterán en una aventura impresionante en la que iremos descubriendo cosas sobre los magos, el humo, la misteriosa organización de los “cruz en los ojos”, los demonios, la magia y todo tipo de cosas a cuál más estrambótica. Como bien dicen en el epílogo de cada uno de los tomos, en lo que se nos resume lo que hemos “aprendido” en las páginas que acabamos de leer, “todo esto todavía… Está en medio del caos… ¡Así es Dorohedoro!”
Por cierto, que si os interesa, Dorohedoro está siendo publicado en Francia por Soleil y me sorprendí mucho cuando vi que la edición de los dos primeros tomos es idéntica a la japonesa, con el relieve “reptiliano” en la cubierta y todo. A partir del tercer tomo supongo que decidieron que no les salía a cuenta y dejaron de poner el relieve, pero los dos primeros son exactos a los originales.

Daitôkyô binbô seikatsu manual (Manual de la vida de pobre en la gran Tokio)

  • Título: 大東京ビンボー生活マニュアル -Daitôkyô binbô seikatsu maual- (Manual de la vida de pobre en la gran Tokio)
  • Autor: Tsukasa Maekawa
  • Editorial: Kôdansha
  • Revista: Morning
  • Años publicación: 1988-89
  • Clasificación: seinen, costumbrista
  • Tomos: 5

Para variar, voy a comentar un manga “raruno”, una de esas cosas que probablemente solo a mí me interesan. Este manga tiene bastante historia para mí. Me explico: antes incluso de empezar a aprender japonés, conseguí unos libros titulados Mangajin’s Basic Japanese Through Comics que explicaban varios conceptos de la lengua japonesa tomando viñetas de manga como ejemplos (no es ningún secreto que me inspiré en estos libros al crear Japonés en viñetas, por cierto, fueron una gran influencia para mí. Antes de que salten los típicos criticones, diré que aunque JeV se inspira en estos libros, el concepto es totalmente distinto y es una obra radicalmente diferente. Que conste en acta XD).
Pues bien, en Basic Japanese Through Comics usaban viñetas de mangas muy diferentes, pero siempre había unos cuantos que salían de forma bastante frecuente, imagino que porque al autor o autores les gustaban especialmente. Uno de estos que salen siempre es este Daitôkyô Binbô Seikatsu Manual (Manual de la vida de pobre en la gran Tokio) y siempre había tenido curiosidad por leerme la historia. Ya veis, una chorrada de motivo.
En todos estos años, a pesar de que a veces pensaba en este cómic y reafirmaba mi idea de querer leerlo, nunca lo había conseguido (tampoco lo había buscado especialmente, la verdad), pero hace poco, cuando volví a pensar en él, se me ocurrió que podría intentar hacerme con él, tuve éxito en mi empeño y por fin me lo leí.
Pobretón hasta las últimas consecuencias

El protagonista del cómic es un chaval llamado Kôsuke que no sabemos muy bien a qué se dedica. Vive en un pequeño apartamento tipo Maison Ikkoku y su filosofía es la de llevar el concepto de “vida de pobre” a su extremo más radical. Así, las primeras 20 o 30 páginas a mí me irritaron bastante porque mostraban actitudes tan radicales como pedirle prestado un cazo al vecino para cocinarse algo o chorradas por el estilo. Como si los cazos costaran tanto dinero… A Kôsuke le ayuda bastante su novia, una chica muy positiva que no sé muy bien qué hace con ese vago, pero le suele invitar a tomar café, o a ir de paseo, etc. Siempre pagando ella. Sí, es un rollo muy raro, ya lo sé, pero es que el manga es raro.
Pero al poco, el cómic sufre una transformación curiosa y se convierte en un manga costumbrista, de tipo contemplativo y hasta poético, que se centra en los pequeños placeres de la vida, en aquellos pequeños detallitos que pueden hacernos felices aunque no tengamos el último modelo de ordenador o de teléfono móvil. Tiene algunas escenas muy bonitas, la verdad.
En cuanto a guión, el manga es bastante anodino, ya lo hemos visto. En cuanto a dibujo, tiene un estilo bastante minimalista y feísta y desde luego rompe el gran mito de que todo el manga japonés tiene personajes de ojos enormes (los ojos del prota son dos simples puntos, si os fijáis). Desde luego, el mundo del manga es muuuuuuucho más que ojos grandes y superpoderes. Si vais leyendo este blog desde hace un tiempo, espero que os hayáis dado cuenta ya de la enorme variedad de estilos de dibujo y temáticas que podemos encontrar en el cómic japonés.

Double Arts

  • Título: ダブルアーツ -Double Arts-
  • Autor: Naoshi Komi
  • Editorial: Shûeisha
  • Revista: Shônen Jump
  • Años publicación: 2008
  • Clasificación: shônen
  • Tomos: 3

Comento este manga a partir de la recomendación que un lector del blog dejó en los comentarios hace algunos meses. La verdad es que me leí el primer tomo hace ya bastantes semanas y en este tiempo fueron surgiendo noticias que hablaban de que su popularidad en la revista Shônen Jump, que había empezado siendo muy alta, iba bajando irremediablemente, hasta que finalmente el manga fue cancelado este septiembre pasado. Así, la serie se quedará con unos míseros tres tomos (el tercero sale dentro de dos semanas).
Y es una lástima, porque como bien comentaba ese lector, el manga tiene un inicio bastante interesante y distinto a lo que acostumbramos a leer en el shônen actual. La historia se enmarca en un mundo alternativo donde una terrible plaga llamada “troy” está causando estragos entre la población. “Troy” es mortal de necesidad y la única manera de librarse de la muerte es recibiendo la ayuda de las llamadas “hermanas”, miembros de una hermandad de mujeres que, aunque no son inmunes a “troy”, sí tienen una alta resistencia a la plaga y son capaces de absorber las toxinas de los cuerpos de los enfermos y curarles. Sin embargo, estas toxinas que succionan de los enfermos se acumulan en su cuerpo hasta que llega el punto en el que su capacidad de absorción se desborda y caen enfermas a su vez. La tragedia de “troy”, y por extensión de las hermanas, es que la enfermedad es contagiosa al contacto físico, por lo que todo el mundo evita tocar a los infectados y a las hermanas y les tratan y miran como si fueran la peste.
Elraine es una de estas “hermanas” que viajan curando a la gente. Sin embargo, al poco de empezar el manga, siente que ha llegado a su límite de tolerancia a “troy” y se dispone a morir irremediablemente. En estas, aparece Kili, un joven pintor muy peculiar, que se acerca a ella y, para horror de los transeúntes ¡la toca! para interesarse por su estado. Y en vez de ser infectado Kili y morir, lo que ocurre es que, en el momento en el que él toca a Elraine, ella recupera su estado normal y el proceso de la muerte se detiene. Parece ser que Kili tiene la extrañísima facultad de, mediante el contacto físico, evitar la muerte de los infectados por “troy”, y esto es algo que podría ser determinante en el proceso de encontrar una cura para la terrible enfermedad.

Dame la manita…

El problema es que si Kili suelta a Elraine, el proceso de muerte volverá a empezar y ella fallecerá, por lo que deciden dirigirse juntos a la base de la Hermandad (donde investigarán a Kili para ver si a partir de él se puede encontrar la tan ansiada cura), siempre cogidos de la mano. Así, ambos deberán comer, dormir, ducharse y pelear siempre cogidos de la mano.
A partir de esta premisa se desarrolla una curiosa historia con mucha acción, pero también humor y misterio. El dibujo también es muy “Jump”, alegre, atractivo y muy digno para ser creado por un autor novel que debutó con esta historia. Es cierto que la idea de que dos personas deben convivir permanentemente cogidas de la mano es bastante original y despierta varias preguntas en el sentido de “¿cómo solucionará el autor el momento en el que los personajes deban hacer X o Y?”. Pero una vez pasado el “subidón” inicial que surge de la originalidad de la historia es cierto que es un argumento complicado de llevar a cabo y que, a la mínima, tiene el peligro de perder interés. Esto es lo que le pasó a este manga, que perdió rápidamente el favor del público y por lo tanto, según el sistema de la Shônen Jump, tuvo que pasar a mejor vida prematuramente.
Hace ya un par de años que la Shônen Jump no consigue encontrar series que consigan un éxito suficiente como para permitir que las ya veteranas One Piece, Naruto, Bleach, Reborn o Gintama puedan pronto conseguir un retiro digno antes de que se echen a perder más de lo que ya pueden estarlo debido a la obligación de extender los argumentos como un chicle que tienen los autores debido a la presión de sus editores. Solo algunas pocas, como Psyren, parecen estar consiguiendo hacerse un hueco, pero la mayoría de intentos en estos dos últimos años, como Double Arts, han terminado en fracaso. El futuro de la Jump, buque insignia del shônen manga, está pues en entredicho. Veamos si consiguen salir del atolladero.