El blog de Marc Bernabé

Museo del pueblo natal de Gōshō Aoyama

Tuesday, October 6th, 2009
  • Nombre del museo: 青山剛昌ふるさと館 –Aoyama Gōshō Furusato-kan– Museo del pueblo natal de Gōshō Aoyama
  • Dirección: 1414 Yurashuku, Hokuei-chō, Tōhaku-gun, Tottori (Google Maps)
  • Cómo ir: A unos 18 minutos a pie de la estación Yura de JR (línea San’in Honsen). Por el camino encontraremos varias estatuas de Detective Conan y atravesaremos el “Gran Puente Conan”.
  • Precio: 700 yenes (adultos), 500 yenes (estudiantes) o 300 yenes (niños)
  • Horario: De 9.30 a 17.30 (17.00 de noviembre a marzo). Según la web japonesa, nunca cierran; según la web inglesa, cierran los martes no festivos y del 31 de diciembre al 2 de enero (WTF!?).
  • Web (en japonés): http://www.gamf.jp/ (en inglés): http://www.gamf.jp/english/
El museo desde fuera (las fotos del museo son "birladas" porque cuando yo fui no existía)

El museo desde fuera (las fotos del museo son "birladas" porque cuando yo fui no existía)

Por petición popular (una persona ^_^, ¡Raúl, va por ti!), me decido a escribir sobre el museo dedicado a Gōshō Aoyama en su pueblo natal de Daiei. Pero voy a hacer un poco de trampa y primero voy a pegar simplemente un artículo que redacté en el año 2004, justo después de mi visita a la zona, y que se publicó en uno de los tomos de Detective Conan editados por Planeta deAgostini.

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Daiei es un pueblo rural japonés situado en la prefectura de Tottori, lejos de cualquier ciudad importante, que limita al norte con el mar de Japón y tiene un censo de 9.300 habitantes. Este pueblo alardea de ser el productor de las mejores sandías de todo Japón, que son valoradas en todo el país por su sabroso sabor, aparte de otros productos rurales como, sake, algas, una especie de patatas alargadas llamadas “ñame de China”, etc.

Aparte de las sandías, sin embargo, Daiei tiene un hijo pródigo del que se siente más que orgulloso: Gōshō Aoyama, el autor del manga que tienes en las manos. Desde que naciera el 21 de junio de 1963, hasta los 18 años de edad, cuando se marchó a Tokio a estudiar a la universidad, el pueblo de Daiei fue el escenario de los sueños del joven Yoshimasa Aoyama (su nombre real), que ya desde la infancia soñaba en convertirse algún día en un famoso mangaka.

Estatuas y carteles de los personajes de Detective Conan en Daiei (actual Hokuei)

Estatuas y carteles de los personajes de Detective Conan en Daiei (actual Hokuei)

Con motivo de la reconstrucción del puente principal, reinaugurado el 23 de noviembre de 1999, Daiei decidió homenajear a su hijo pródigo dedicándoselo: ahora se llama Conan Ōhashi (Gran Puente Conan). El puente está decorado con cinco pequeñas pero muy simpáticas estatuas de Conan Edogawa, el personaje estrella del dibujante, que decoran ambos extremos del mismo y los faroles. Además, cuatro placas con dibujos a relieve decoran los laterales del puente: en dos de ellas aparece Conan jugando al fútbol y, en las otras dos, el joven detective corre un maratón junto a una sandía y a un ñame. Esta última es destacable porque en ella se encuentran todos los símbolos de Daiei: el maratón, que se corre todos los años en julio, las sandías, los ñames y, por supuesto, Conan.

Varias de las estatuas que decoran el puente

Varias de las estatuas que decoran el puente

Pero no todo acaba aquí, porque el rural y tranquilo pueblo de Daiei, sin duda con vistas a atraer más turistas, ha dispuesto varios homenajes a Conan por todo el pequeño centro del pueblo. Por ejemplo, tenemos una Conan Ōdōri (Gran Calle de Conan), que tiene la particularidad, aparte del nombre, de que las tapas del alcantarillado están adornadas con el mismo dibujo de Conan corriendo con la sandía y el ñame, y de que cada unos cuantos metros hay un cartel con el nombre de la calle y una ilustración del avispado detective.

Otras estatuas dispuestas por el pueblo son las dos que hay de Shinichi Kudō, una ante la biblioteca, en la que está en una pose de espera, mirando su reloj (¿esperando a Ran?), y la otra cerca del puente, donde está junto a una puerta abierta. Además, hay también dos estatuas más del pequeño Conan Edogawa, una cerca de la estación de tren y la otra en un parque junto al mar.

Detallitos...
Detallitos…

Para los más curiosos, en el Centro de aprendizaje de cultura e historia de Daiei se ha preparado una pequeña exposición permanente sobre Gōshō Aoyama. En ella se pueden admirar pósteres, acetatos y dibujos originales de las obras de Aoyama, entre otros objetos. Lo más curioso sin embargo es la parte dedicada al propio autor, con fotos e ilustraciones suyas de cuando iba a la escuela, e incluso un manga que dibujó cuando todavía iba a primaria. Es una oportunidad ideal para comprobar la trayectoria de un artista desde sus mismísimos orígenes.

Por último, y ya para los más fetichistas, muy cerca del puente se sitúa la Conan Shop, un pequeño establecimiento donde se vende todo tipo de merchandising de la serie: en ella podemos encontrar desde los tomos del manga hasta camisetas, toallas, pegatinas, etc. Los coleccionistas querrán hacerse con cualquiera de los productos originales que sólo se venden en esta tienda en concreto, como cajas de galletas con la efigie del pequeño detective.

En definitiva, darse un paseo por Daiei puede convertirse en una divertida búsqueda “detectivesca” de rastros de Conan. Aunque no merece la pena desplazarse expresamente, puede ser una buena parada de un par de horas en un recorrido por el Japón más “profundo”. ¿Te apuntas?

La antigua "Conan Shop" (foto de 2004)

La antigua "Conan Shop" (foto de 2004)

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¿Y bien? ¿Qué tal el artículo? Bien, ¿verdad? Pasé por Daiei con unos amigos en 2004 en ruta hacia el santuario sintoísta de Izumo y la ciudad de Matsue, y como no sé cómo se me había quedado grabado en la mente (sí, mi mente es un poco extraña: me quedo siempre con cachos de información que no sé de dónde saco, pero en contrapartida me olvido de cosas como los argumentos de películas, libros y tal…) que había “algo de Gōshō Aoyama” en un pueblo llamado Daiei, sugerí a mis compañeros de ruta que paráramos allí… Más tarde, por cierto, les convencí para parar también en Sakai-Minato, donde visitamos la Shigeru Mizuki Road; fue todo en el mismo día, mis colegas creo que me odiaron aquel día por frikazo integral. XD.

Las cosas, por lo que veo ahora, han cambiado mucho en Daiei en estos cinco años. Para empezar, el pueblo ya no se llama Daiei. Ahora se hace llamar Hokuei, después de la fusión de los núcleos de población de Daiei y Hōjō en octubre de 2005. Seguidamente, por lo que veo parece que hay más estatuas de Conan y sus compañeros por el pueblo, porque ahora, investigando por internet, he visto fotos de algunas que no recuerdo haber visto en su momento.

La mesa de trabajo de Aoyama

La mesa de trabajo de Aoyama

Pero lo más destacado es que el espacio dedicado a Aoyama en el Centro de aprendizaje de cultura e historia de Daiei y la tiendecita (muy-muy cutre, prácticamente un garaje) que describía en su artículo han sido sustituidos por un pedazo de museo dedicado a Gōshō Aoyama y a su obra cumbre, Detective Conan. El museo, que en japonés se llama Aoyama Gōshō Furusato-kan (algo así como “Museo en el pueblo natal de Gōshō Aoyama”), en inglés recibe el nombre de Gōshō Aoyama Manga Factory. Pos fale.

Por lo que veo en la web oficial (por cierto, tiene sección en inglés, pero muy rudimentaria y ¡¡¡con información contradictoria respecto a la parte japonesa!!!) estamos ante un museo más que decente: está la sala dedicada a la vida y milagros de Aoyama; otra sala dedicada a Detective Conan (con una reproducción de la mesa de trabajo de Aoyama, páginas originales del manga, fotogramas y acetatos del anime, algunas estatuas, muestras de las ediciones internacionales del manga, etcétera); otra dedicada a los “inventillos” que se saca de la manga, como la pajarita que sirve para alterar la voz, o el balón de fútbol, así como a muestras del amplio merchandising dedicado a Conan… Y también detalles como un tablón de anuncios para los fans, ordenadores que lanzan preguntas para “resolver el misterio”, un teatrillo de marionetas, un carillón… Y, por supuesto, la tienda oficial donde comprar todo tipo de merchandising exclusivo. Vamos, un museo realmente interesante.

La sala del museo dedicada a Detective Conan

La sala del museo dedicada a Detective Conan

Hokuei está un poco donde el Buda perdió la sandalia, ahí perdido en la costa del mar de Japón, lejos de toda ciudad mínimamente importante. Aun así, se puede llegar en tren (unas 3.30 horas desde Osaka, casi 4 desde Kioto). Sin embargo, por practicidad (no pasan muchos trenes al día) recomiendo hacer lo mismo que hice yo: coger un coche de alquiler entre unos cuantos y hacer una ruta por la zona que podría incluir por ejemplo los baños termales de Kinosaki, el bello paisaje de Ama-no-hashidate, la famosa duna desértica de Tottori, la propia Hokuei, Sakai-Minato (con visita a la Shigeru Mizuki Road y al museo de Mizuki), la entrañable ciudad de Matsue y el milenario santuario sintoísta de Izumo. Así se combinaría bastante bien lo que sería el turismo por una de las partes más rurales de Japón (con zonas preciosas y muy poco visitadas por el extranjero) con un friki-tour de tomo y lomo. ¿Te apuntas?

Bonus track: en el Japón rural, a veces te encuentras con perlas como esta: el cartel de una peluquería. ¡Brutal!

Bonus track: en el Japón rural, a veces te encuentras con perlas como esta: el cartel de una peluquería. ¡Brutal!

Poniéndome al día

Monday, October 5th, 2009

Después de la semana especial de homenaje a Yoshito Usui (que al final acabaron siendo casi dos semanas) decidí tomarme unos días de descanso en el blog, que hoy doy por finalizados. Así, vuelvo a la actividad normal e intentaré ir actualizando a un ritmo ideal para mí de unos tres posts a la semana. En cualquier caso, me gustaría hacer una valoración general y contaros un poco de todo.

1. Diseño del blog

Aún está en bragas este tema. WordPress me está gustando mucho y he encontrado este tema que veis ahora -Imagination- que me gusta mucho y con el que estoy muy cómodo. Tengo la idea de mejorar el diseño, pero entre lo de Usui y otros temas personales que me han quitado muchas horas he quedado saturado. Con esto quiero decir que el aspecto del blog seguirá variando.

2. La encuesta

Ni siquiera llegué a avisar sobre la encuesta de “¿Qué manga prefieres que reseñe?”, puesta aquí al lado, ya que estuve haciendo pruebas y la puse justo el día antes de que ocurriera lo de Usui. A pesar de la nula promoción que hice de la encuesta por culpa de lo ocurrido, se han acumulado casi 300 votos, y ha pasado algo muy interesante de ver. Al principio más o menos iba todo un poco renqueante, hasta que Vinland Saga se puso claramente en cabeza. Entonces ya pensé que este era el manga que me tocaría reseñar primero… Pero poco después se reanimó el único shôjo de la lista, Skip Beat!, que empezó a acumular votos hasta finalmente sobrepasar a Vinland Saga. Poco después, no sé muy bien por qué razón, Cat’s Eye empezó a acumular votos e incluso llegó a superar a Skip Beat!. Estos últimos días, Cat’s Eye y Skip Beat! han ido bastante a la par, hasta el punto de que hoy, con 298 votos en total, Skip Beat! va primera, con 72 votos, y Cat’s Eye segunda, con 71. ¡Increíble! Vinland Saga, el primer líder, lleva 57, mientras que Kamen Rider, con 53, y Shin-takarajima, con 43, consiguen muy buenas puntuaciones también. La única descolgada es la pobre Beatitude (¡una especie de pseudo-yaoi que se inspira en la vida de los mangaka del Tokiwa-sô! ¡Tiene que ser la pera!), con dos míseros votos.

No os preocupéis si vuestro manga favorito no ha ganado. De todos modos tenía intención de, tarde o temprano, reseñar todas estas obras manga. La cuestión que se debatía aquí no era tanto si los reseñaré o no, sino cuándo, así que pronto tendréis reseñas de Skip Beat!, Cat’s Eye y Vinland Saga, y más adelante de Kamen Rider, Shin-takarajima y Beatitude. Por cierto, para la próxima encuesta podéis mandarme sugerencias a través de los comentarios de este mismo post.

3. Autobombo

Este mes de octubre llega lleno de actividades y conferencias. Básicamente, podría estar haciendo presentaciones y cosas como una vez al mes durante todo el año, pero todo el mundo se empeña en hacerme currar a destajo en el mes de octubre. El año pasado ya fue así. ¿Qué tiene octubre que gusta tanto? XD

Aún están muchas de las cosillas por confirmar, pero para que os vayáis haciendo a la idea esto es lo que se hará:

  • Dos presentaciones del método Kanji en viñetas en sendas librerías de Barcelona. Las dos serán distintas para que podáis venir a ambas si tenéis ganas y, más que como presentaciones editoriales de libros, las estamos planteando como homenajes a Alberto Aldarabí, “Tenchi”, coautor de estos libros, traductor y gran amigo que nos dejó recientemente. De estas sí están fechas confirmadas: el 9 de octubre (¡este viernes!) en Llibreria Bertrand, y el 21 de octubre en Casa del Llibre, las dos a las 19.00 h. Si todo va bien haremos algo en el Salón del Manga y probablemente habrá una tercera en FNAC Triangle, en noviembre. En enero o febrero nos pasaremos por Madrid, por cierto.
  • Charla homenaje a Yoshito Usui en Casa Asia Barcelona. Probablemente el día 26 de octubre a las 19.00. Por confirmar.
  • Charla sobre Osamu Tezuka en Amics de la UNESCO Barcelona. Por confirmar, pero puede que sea el 19 de octubre. Será más o menos la repetición de la que hice en noviembre pasado, así que si os la perdisteis, os la recomiendo encarecidamente.
  • Salón del manga, donde estaremos, como en los últimos tres años, de responsables e intérpretes de los invitados, y personalmente en mi primer año como “Asesor cultural para el Salón del Manga” de FICOMIC. Este año tenemos confirmados al gran Taiyo Matsumoto y su guionista Issei Eifuku, así como a las Embajadoras Kawaii y al especialista en diplomacia a través del anime Takamasa Sakurai. Quedan otros por confirmar, uno de ellos un peso pesado muuuy gordo, de primerísimo nivel, que ojalá acabe cayendo. Crucemos los dedos.

Ehm, creo que no me dejo nada. Bueno, en cuanto se vaya confirmando exactamente todo, pondré una agenda aquí al lado, donde está la encuesta, para que lo tengáis todo bien apuntadito.

Y ahora… Sigamos con lo nuestro.

Entrevista a Yoshito Usui (año 2008)

Wednesday, September 30th, 2009

Como traca final de mi homenaje particular a este gran autor y amigo que fue Yoshito Usui, aquí va la entrevista (más bien, una distendida conversación) que le hice el año 2008 y que se publicó por entregas en los tomos 1 a 4 de la nueva edición de Shin Chan de Planeta deAgostini. Y hasta aquí llega esta intenso homenaje, espero que os haya gustado. Por mi parte, ahora me tomaré unos días de descanso y la semana que viene retomo el blog con su curso habitual.

Tomo 1 de la nueva edición de Shin Chan de Planeta deAgostini en la que se publica la primera parte de esta entrevista

Tomo 1 de la nueva edición de Shin Chan de Planeta deAgostini en la que se publica la primera parte de esta entrevista

Conversación con Yoshito Usui

por Marc Bernabé (equipo de traducción de Shin-chan)

Hace unos años tuve la suerte de conocer a Yoshito Usui, el creador de Shin-chan, y su esposa Hisako, en Tokio. Con el tiempo, mi compañera Verònica Calafell y yo hemos acabado haciendo muy buenas migas con el matrimonio Usui y nos hemos visto repetidas veces. Después de reiteradas invitaciones a visitar España para que pudieran ver de primera mano el fenómeno que su niño cabezón e impertinente ha despertado en nuestro país, finalmente aceptaron, pero con dos condiciones: querían venir en un viaje estrictamente privado y, por encima de todo, querían probar la comida casera de mi abuela (!), de la que tanto les había hablado en Tokio.

Usui acaba de cumplir los 50 años y, aunque siempre se vaya quejando de su “avanzada” edad, es un hombre muy dinámico que va a nadar todos los días para mantenerse en forma. Es modesto y no quiere que su foto salga publicada en ningún medio porque, según él, si se conociera su cara, bajaría la popularidad de su serie fetiche.

Aprovechando la coincidencia de su visita a Barcelona con la decisión por parte de esta editorial de publicar una nueva edición del manga de Shin-chan, mantuvimos la conversación que transcribimos a continuación:

Marc Bernabé: Buenos días, señor Usui, y gracias por atendernos hoy. ¿Qué le parece empezar explicándonos su trayectoria?

Yoshito Usui: Bueno, si quieres te cuento un poco mi vida. Verás, nací en el año 1958 en Shizuoka, aunque actualmente vivo en la ciudad de Kasukabe, en la prefectura de Saitama, a una hora y pico de Tokio. No fui a la universidad; en vez de eso, decidí estudiar en una escuela de diseño, a la par que trabajaba a tiempo parcial. No acabé el curso de diseño, pero eso no me impidió entrar a trabajar en una empresa de publicidad, donde me dedicaba a hacer ilustraciones para anuncios y este tipo de cosas.

Pero a mí lo que me gustaba era el manga y, aunque dibujo fatal, quise hacer mis pinitos, así que en 1987 envié una historia a la editorial Futabasha. Resultó que les gustó e incluso recibió un pequeño premio. Eso me permitió debutar con un manga llamado Daraku-ya Store Monogatari (Historia de la tienda de los corruptos). Con el tiempo, pude ir dibujando varios manga que me encargaban para las revistas que publica la editorial, sobre todo la Manga Action. Se trataba principalmente de pequeños gags de cuatro viñetas, de esos que tanto gustan en Japón. Luego, en 1990, empecé con Shin-chan, serie con la que sigo actualmente. Aparte de Shin-chan, otra serie representativa mía sería Super Shufu Tsukimi-chan (Tsukimi, la superama de casa).

MB: ¿Y cómo se le ocurrió la idea de Shin-chan? Sabemos que usted tiene dos hijas. ¿Se ha inspirado en ellas?

YU: Sí, sí, sobre todo en mi hija pequeña, que cuando tenía cinco años hacía cosas que nunca hubieras esperado que hiciera. Me encantaba observarla y ver con qué trastada me sorprendería cada vez. En general, mi inspiración proviene de mis propias experiencias como niño, de observar a mis hijas y a los demás niños y personas de la calle.

MB: Supongo que ni usted ni sus hijas iban por ahí enseñando el culo (risas).

YU: ¡No, no, claro que no! (risas) Esto es una cosa que me saqué yo de la manga para darle más carácter a mi personaje. La verdad es que, aunque no lo parezca, el humor que a mí me hace gracia es bastante soez; un tipo de humor que, al menos en Japón, no queda muy bien. Quiero decir, que si cada vez que se me ocurre una de mis paridas más bien “guarrillas” la soltara en público, mi mujer ya haría años que me habría pedido el divorcio por la vergüenza ajena que le haría pasar (risas). Así, el manga de Shin-chan es una especie de válvula de escape a través de la cual puedo aliviar mis imperiosas ganas de decir chistes guarros.

MB: Es cierto, este tipo de humor gusta también mucho en España.

YU: Y en Japón también, lo que pasa es que queda mal reconocerlo. Sé de buena tinta que Shin-chan tiene muchísimos “lectores escondidos”. Es decir, gente que disfruta mucho leyendo la serie y se ríe con mis bromas estúpidas, pero que nunca lo reconocería en público. Queda muy bien decir “me encantan los manga de Naoki Urasawa” (del que, por cierto, soy gran fan), pero si dices que te encanta leer Shin-chan entonces la gente te mira raro.

MB: Creo que entiendo lo que quiere decir (risas). En este sentido, España es un país más abierto. Es cierto que probablemente hay muchos fans de Shin-chan que nunca confesarían serlo en público, pero aquí la gente no se corta tanto y al que le gusta Shin-chan, normalmente lo dice sin problemas. Ya que estamos, ¿cuál cree que es el secreto del éxito de su serie?

YU: Vaya, es una pregunta complicada… Yo creo que la propia naturaleza de Shinnosuke y su familia es lo que ha conseguido que Shin-chan no sea flor de un día. Los Nohara son una familia totalmente normal, llena de defectos, es cierto, pero también les une un vínculo fortísimo que hace que siempre estén unidos ante cualquier adversidad. Es una familia totalmente normal que se pelea y se discute, pero que también lo pasa muy bien y se quiere con locura. En este sentido, mi familia es muy parecida a los Nohara: somos todos bastante simplones e ingenuos, pero cuando nos reímos, nos reímos de verdad; y cuando nos peleamos, nos peleamos de verdad. Y, por encima de todo, nos queremos mucho.

MB: Vaya, tiene que ser maravilloso tener una familia como esta. Felicidades.

YU: Gracias. Estoy muy contento de tener la familia que tengo, y por lo que te conozco, estoy seguro de que tú tendrás una similar. Ahora mis dos hijas, por cierto, están trabajando como ayudantes mías. Entre los tres vamos dibujando el manga y la verdad es que las dos trabajan muy bien.

MB: ¡Qué suerte! Aparte del anime, existen multitud de productos derivados de su personaje, películas, videojuegos, etc. ¿Colabora en su creación?

YU: Al principio sí colaboraba: solían pedirme la opinión para casi todo. De hecho, las tres primeras películas de cine están basadas en historias originales mías. Sin embargo, en un momento dado me di cuenta de que se conseguían mejores resultados en todos los aspectos si yo no estaba involucrado, así que decidí dejarlo todo en manos de los respectivos equipos que se habían formado.

MB: Venga, hombre, ya será menos… Eso es mucha modestia por su parte.

YU: ¡Pero es que es verdad! Mis historias son bastante sosas comparadas con las que se sacan de la manga otros creadores jóvenes. He tenido la suerte de que con las versiones animadas de Shin-chan, tanto de televisión como de cine, han trabajado y trabajan estupendos directores y creadores jóvenes y llenos de energía. Así que creo que lo mejor es dejar a los personajes en sus manos para que vayan renovándolos y dándoles su propio toque personal. Yo, por mi parte, me dedico exclusivamente a la versión manga.

MB: En ese caso, ¿cabría por ejemplo la posibilidad de que algún prometedor creador español, ya sea director de cine, creador de videojuegos o lo que sea, trabajara en el futuro en productos relacionados con Shin-chan?

YU: Claro, claro, por supuesto. Por mi parte, sería un placer.

MB: ¿Le ha sorprendido el éxito que Shin-chan ha tenido y sigue teniendo en España?

YU: Por supuesto, ha sido una enorme sorpresa. España es un país que está muy lejos de Japón, por lo que nunca habría imaginado que una obra mía sería tan bien recibida en un lugar tan lejano y diferente. Piensa que el modo de vida de los españoles y los japoneses también es bastante distinto, por lo que aún me alegra más que gente a priori tan alejada del estándar japonés lea mi cómic y vea la serie de animación basada en mis personajes. Es una gran sorpresa.

MB: Por cierto, el otro día estábamos paseando por mi vecindario y nos cruzamos a un abuelito, ¿recuerda? Aquel abuelito, vecino y conocido mío, me saludó y me preguntó qué tal estaba. Yo le respondí que muy bien y luego les presenté a usted y a su esposa diciéndole que “este señor es el creador de Shin-chan y ella es su mujer”. ¿Recuerda lo que le dijo el abuelo?

YU: ¡Sí, sí! (risas) ¡Me preguntó que si yo no iba por ahí enseñando el culo, como Shinnosuke!

MB: Exacto. Supongo que con esta anécdota le ha quedado claro que, en España, Shinnosuke se ha convertido en un personaje entrañable y conocido por absolutamente todos, jóvenes y viejos. ¿A qué cree que es debido?

YU: Bueno, ¡de hecho ya me gustaría a mí saberlo! (risas) Yo imagino que es gracias a la tarea de todos los que trabajáis en este proyecto aquí en España. Por ejemplo, sin las estupendas traducciones que Verònica y tú realizáis, mi serie no habría tenido ni la mitad de éxito. Yo coloco en el manga muchísimas bromas y juegos de palabras que tienen sentido solo en japonés, pero vosotros las adaptáis y creáis juegos de palabras distintos que funcionan tan bien o mejor que los del original. Si la gente no se riera con las barrabasadas de Shinnosuke, lógicamente la serie no tendría ningún éxito. Así que considero que vuestro trabajo de traducción tiene que ser una de las claves.

MB: Como diría Shin-chan, sonrojándose, “No es para tantooo” (risas). El mérito es de un equipo muy profesional y muy grande: los estupendos actores de doblaje, el licenciatario de la serie, que ha sabido venderla y colocarla muy bien, las cadenas de TV que han confiado en Shin-chan y la han mimado, la editorial Planeta deAgostini, que publica el manga y procura que todo el mundo lo pueda comprar y disfrutar…

YU: Claro que sí, no te falta razón. Es un trabajo de equipo en el que, si fallara una sola pieza, los resultados no serían los mismos.

MB: A mí lo que no deja de sorprenderme es que en otros países muy cercanos tanto física como culturalmente a España, como Francia o Italia, la serie ha pasado sin pena ni gloria. Los Pirineos están a poco más de cien kilómetros de aquí, Barcelona, y justo al otro lado está Francia… Aquí, la serie ha tenido un éxito espectacular y en cambio al otro lado de los Pirineos no ha acabado de arrancar. De hecho, el único país occidental en el que Shin-chan ha obtenido un éxito sonado es España… En fin, cambiando de tema, ahora mismo se encuentra en nuestro país en un viaje privado. ¿Qué le ha parecido lo que ha visto hasta el momento?

YU: Bueno, antes de venir a España tenía la típica imagen de ella que tenemos todos los japoneses: los toros, el calor, el cielo azul… En definitiva, y usando el apodo que le damos en Japón, “el país de la pasión”. Así que pensaba que vería a mucha gente extremadamente pasional, llena de energía y vitalidad. Y realmente ha sido así: he tenido la gran suerte de poder conocer a vuestras familias y todos ellos me han parecido adorables, muy amables y alegres. Y, por encima de todo, he visto que no solo están llenos de energía, sino también de buenas intenciones. Esto es lo que más recordaré, sin duda. Ayer, por ejemplo, estábamos paseando mi mujer y yo y acabamos perdiéndonos. Le preguntamos el camino a un chico que vimos por la calle y, aunque ni él sabía japonés ni nosotros español, hizo un gran esfuerzo por entendernos e indicarnos con muchísima amabilidad por dónde ir. Por el momento, aquí todavía no he conocido a nadie que me haya causado mala impresión, la verdad.

MB: Vaya, me alegro muchísimo de oír esto. A propósito, Shinnosuke ha visitado Barcelona en el anime, pero no en el manga. ¿Hará que los Nohara visiten nuestro país en el manga?

YU: ¿Pues sabes una cosa? No había caído en eso, pero es verdad. De acuerdo, lo haré. Este mismo año me comprometo a hacer una historia sobre Shinnosuke en España.

MB: Vaya, pues ya tengo ganas de leerla.

YU: No te quepa duda de que voy a sacaros a todos, que conste. No tengo ni idea de cómo enfocaré la historia, pero supongo que las familias tendrán un papel protagonista.

MB: Vaya, ¡qué vergüenza! ¡A ver con qué travesuras nos “atacará” Shin-chan! Por cierto, ¿tiene alguna anécdota curiosa que contarnos?

YU: ¿Alguna anécdota curiosa? Bueno, pues por decir algo que me haya ocurrido recientemente, ¿recuerdas el otro día, cuando estuvimos jugando un rato al ping-pong en casa de tu abuela? Pues nunca en la vida me habría imaginado que algún día jugaría a ping-pong con una familia española, y es algo que recordaré con mucho cariño. Igual que ayer, cuando vinimos escuchando canciones de Hikaru Utada en el coche, una cantante japonesa que me gusta muchísimo. Fue muy curioso estar viendo un paisaje tan distinto al japonés a la vez que escuchaba la voz de una cantante que oigo en casa a menudo.

MB: Ciertamente, produce una sensación extraña, sí… En lo referente a anécdotas, por cierto, también está lo de que la ciudad de Kasukabe les concedió a Shin-chan y su familia la ciudadanía honorífica.

YU: Cierto, esto tampoco me lo esperaba.

MB: Y es que es algo que no es muy común, al menos para personajes de manga y anime. Creo recordar que el primero en recibir tal honor fue Astroboy y poco después llegó el turno de los Nohara.

YU: Bueno, puede ser, pero me parece que es algo que últimamente está bastante de moda en Japón, tampoco tiene tanto mérito. Se les da la ciudadanía a varios personajes de ficción que han tenido mucha influencia en la sociedad, no sé. Esto demuestra, imagino, que el manga es una poderosa herramienta que proporciona sueños a la gente. Pero sí, la verdad es que el hecho de que los Nohara sean ahora ciudadanos de Kasukabe en la vida real, igual que yo mismo, fue algo que nunca habría imaginado y es una anécdota curiosa que contar.

MB: Hace unos meses estuve hablando con su editor en Japón, el señor Masuo, que me contó que su sueño era superar con Shin-chan la gesta de Jarinko Chie, el manga con más tomos que ha publicado jamás la editorial Futabasha, con un total de 67 volúmenes. ¿Qué tiene usted que decir a esto? ¿Se ve capaz de superarlo?

YU: Hombre, lo siento por el pobre Masuo, pero la verdad es que no. De hecho, últimamente he disminuido considerablemente el ritmo de trabajo y solo produzco material como para publicar un solo tomo al año. Haciendo cuentas, y pensando que ahora mismo todavía no he llegado al tomo 50 y que Jarinko Chie se terminó en el 67, pues tardaría… ¡Casi veinte años más! Y me temo que mi cuerpo se acabará rindiendo antes, la verdad.

MB: Bueno, tal vez la solución sería dejar la serie en manos de sus ayudantes, que como nos ha dicho antes son sus propias hijas…

YU: Sí, sí, no estaría mal. Podrían heredar la serie, es verdad, y así yo podría dedicarme a hacer el vago sin parar (risas).

MB: Cambiando un poco de tema, ¿es Usuto Yoshii, el mangaka que sale en la serie, una representación de su propia persona o se inspiró de alguna manera en su figura para crearlo?

YU: Ya sabes que Usuto Yoshii es un tipo bastante despreciable, ¿no? Pues está inspirado en mí, efectivamente, pero solamente en lo que respecta a mis defectos y la faceta más ruin de mi carácter. Es un poco como si fuera “el Usui malvado”, el lado oscuro de mi persona.

MB: Lo entiendo muy bien. Aunque… Disculpe la pregunta, pero supongo que no se dedica a fotografiar sus excrementos después de haber ido al váter como hace Yoshii, ¿verdad…? (risas)

YU: (risas) No, no, fotos no saco, pero sí procuro observarlos, ¿sabes? Los miro y pienso “vaya, hoy me ha salido muy saludable”, o “buf, últimamente tengo el cuerpo revuelto”. ¿Tú no haces lo mismo?

MB: (risas) No, no, ni se me había ocurrido.

YU: Pues es muy importante observar la propia caca, hombre. Es un buen método para comprobar cómo andas de salud.

MB: Ya, bueno… (risas) Dejemos este tema, que esto empieza a oler mal… (risas) Por cierto, en un par de las películas de animación sale otro personaje, que tiene su propio nombre (Yoshito Usui) y que no parece mala persona. De hecho, aparece en unos cameos cantando en el karaoke y todo, y de hecho se lleva bastantes palos, el pobre…

YU: Ah, ese personaje es distinto a Usuto Yoshii, hombre, porque soy yo mismo. Este otro pobre diablo sale vestido de forma rarísima, le pegan bastante… De hecho, no sé si sabías que fui yo mismo quien le puso la voz.

MB: ¿De verdad? ¿Incluso cuando canta en el karaoke es usted mismo cantando?

YU: Sí, sí, incluso en el karaoke. Bien pensado, aquí tienes otra de esas anécdotas curiosas sobre las que me preguntabas antes. ¡He hecho mis pinitos en el mundo del doblaje y todo! (risas)

MB: ¡Qué suerte! (risas) Por cierto, usted no es muy dado a conceder entrevistas, por lo cual esta charla es un privilegio absoluto, ¿pero cuál es la pregunta que le gustaría que le hicieran y que nunca le han hecho?

YU: Vaya, pues no suelen preguntarme qué tipo de mujeres me gustan, ni tampoco cuáles son mis aficiones, ni qué películas me han gustado últimamente, porque piensa que a mí me gusta bastante el cine. Y son preguntas que me gustaría que me hicieran.

MB: Bueno, pues vamos allá: ¿empezamos por las películas?

YU: Sí, perfecto. Mira, de cine americano últimamente he disfrutado bastante de las películas de Resident Evil y de la saga de Bourne. Me gusta bastante este tipo de cine. También tengo muchas ganas de ver la nueva de Indiana Jones.

MB: ¿Y qué hay de lo de las mujeres?

YU: Ay, las mujeres… Pues mira, de japonesas me gustan tipo Aya Hoshino, que es una modelo muy guapa y muy famosa. Es tan mona y simpática… De occidentales, pues creo que me quedo con Angelina Jolie.

MB: Vaya, vaya, no tiene mal gusto (risas). Finalmente, ¿cuáles son sus aficiones?

YU: Pues recientemente me ha dado por ir a balnearios, que en Japón hay muchos y muy variados. Solemos ir mi mujer y yo a un balneario distinto de los que quedan relativamente cerca una vez al mes, para pasar allí una noche y relajarnos. Vamos a Nikkō, a Shimoda… A veces vamos un poco más lejos. Nos sirve para desconectar un poco.

MB: Para terminar, con ocasión de esta nueva edición del manga en España, ¿tiene algún mensaje para los lectores?

YU: Pues a los nuevos lectores del manga les diría que muchas gracias por leer mis historias y que, si alguna vez les ocurre algo desagradable y mi manga les ayuda a animarse, me harán muy feliz.

MB: Me parece una manera fantástica de dar por terminada la charla. Muchísimas gracias por dedicar este tiempo a los lectores de esta nueva edición del manga, ha sido un placer.

YU: Al contrario, muchísimas gracias a todos los lectores y televidentes por el apoyo que le están dando a mi personaje.

(Entrevista realizada el 24 de mayo de 2008 en Barcelona)

Entrevista a Yoshito Usui (año 2002)

Tuesday, September 29th, 2009

Para dar por concluida esta semana de homenaje a Yoshito Usui (que al final serán diez días), voy a publicar en este blog, con el amable permiso de Planeta deAgostini, las dos entrevistas que le realicé a Yoshito Usui en su día. La primera es del año 2002, del mismo día en el que le conocí.

Portada del tomo de Planeta deAgostini en el que se publicó esta entrevista

Portada del tomo de Planeta deAgostini en el que se publicó esta entrevista

Lo siento, pero no tengo el texto redactado en mi ordenador (solo he encontrado la versión catalana) así que os tendréis que conformar con scans de las páginas del volumen 9 de la edición A4 de Shin Chan. Por cierto, vaya cagada del diseñador, que puso Yoshio en vez de Yoshito. Ingrid Mesado, Viviana Gorgollón y Josep Sadurní tradujeron en su momento al castellano, a partir del original catalán, esta misma entrevista. Ahora me la acaban de mandar, por lo que debajo de las dos páginas escaneadas pego su texto. ¡Muchas gracias por cederlo!

Mañana mismo subiré la otra entrevista, esta sí en formato texto y muuuucho más extensa que esta. Espero que os gusten. Como siempre, haced clic en las imágenes para ampliarlas.

entrevista1-1

entrevista1-2

Día 16 de Febrero de 2002, barrio de Ginza, Tokio. Marc Bernabé, uno de los traductores de Shin-Chan, se encuentra con Yoshito Usui, creador del personaje, y lo entrevista. Aquí tenéis los resultados.

Marc Bernabé, que firmo esta entrevista, soy junto con Verónica Calafell el traductor de la serie Shin-chan al catalán, tanto en la versión animada que emite el 3xl.net, del canal K3, como en la versión cómic que edita Planeta DeAgostini. De hecho, este texto sale publicado en ambos sitios. Conseguí concertar una cita con el dibujante Yoshito Usui, el creador de Shin-chan, y su mujer, una encantadora pareja, y aproveché para hacerle la entrevista siguiente después de explicarle el éxito que tiene su creación en Cataluña y la polémica que ha generado.

Cabe destacar que tiene una superstición con las fotografias: sostiene que si su foto o imagen sale a luz públicamente, entonces sus creaciones dejarán de venderse y de tener éxito. Es una superstición como cualquier otra, pero el hecho es que no pude hacerle ninguna fotografía para ilustrar el artículo. A cambio, me obsequió con un dibujo y una dedicatoria (¡en catalán!) para todos los lectores y espectadores de Shin-Chan.

Yoshito Usui es un hombre afable de cuarenta y pocos años, delgado y de estatura mediana, con el pelo largo hasta los hombros teñido discretamente de castaño. La verdad es que no se parece prácticamente en nada a su parodia de la serie, Usuto Yoshii. No tiene bigote ni tampoco lleva gafas.

Bien, después de esta pequeña introducción pasaremos a la entrevista…

Comencemos la entrevista. Ante todo, buenas noches. Primera pregunta: ¿Cuándo debutó?
Yoshito Usui: “Buenas noches. Bueno, fue cuando tenía 27 años… es decir, debe hacer unos 15 años. Comencé a dibujar Shin-chan hace unos 11 años, más o menos… Y un año después, se estrenó la serie en la televisión. Actualmente, se celebran los diez años de emisión”.

¿Qué otras obras ha dibujado, aparte de Shin-chan?
Y.U.: Sólo tengo una, se llama Super Shufu Tsukimi-san (La Sra. Tsukimi, super-ama de casa).

¿Eh? ¿Sólo una? Pero si hay otras… Yo las he visto en las librerías…
Y.U.: Bueno, aquellas son obras de hace muuucho tiempo… Y no las quiero contar porque me da vergüenza (risas). O sea, que lo dejamos en Shin-chan y Tsukimi-san.

Muy bien, como usted quiera… Por cierto, ¿vive en la ciudad de Kasukabe, igual que Shin-chan? ¿Tiene hijos?
Y.U.: Sí, vivo en Kasukabe, pero allá no hay absolutamente nada, es una ciudad muy aburrida… Y sí, tengo dos hijas de 17 y 15 años respectivamente.

¿Se parecen a Shin-chan, sus hijas?
Y.U.: Pues no, no mucho… (risas)

¿De dónde sacó la idea de Shin-chan?
Y.U.: De mi propia infancia…

¡No me diga que usted se parecia a Shin-chan, cuando era pequeño!
Y.U.: No, parecerme, no mucho, pero siempre he pensado que me hubiese gustado ser un niño como él…

¿En qué le habría gustado parecerse a Shin-chan? ¿Quiere decir que le gusta el carácter de su personaje?
Y.U.: Eso mismo… Ojalá hubiese sido tan revoltoso como él (risas).

¿De dónde saca los gags y los juegos de palabras que salen continuamente en la serie?
Y.U.: Bueno, sobre los juegos de palabras, no he inventado nada nuevo, simplemente me fijo en los niños, en qué hacen y qué dicen, y ellos suelen cometer este tipo de errores con el lenguaje, muchas veces adrede. De hecho, me imagino que los niños catalanes deben hacer exactamente lo mismo. Me gustan mucho los niños y me fijo bastante en ellos.
Sobre los gags, bueno… Supongo que me los invento a base de observar todo lo que pasa a mi alrededor y también inspirándome en mi propia experiencia.

En un principio, la obra se publicó por entregas mensuales en una revista muy poco conocida llamada Manga Action (ahora, no obstante, la serie se publica en la revista Manga Town) ¿Por qué cree que Shin-chan, siendo una serie que en principio muy poca gente tendría que conocer, ha tenido un éxito tan grande en Japón?
Y.U.: Pues no tengo ni idea… (risas) Ni la más remota idea.

¿Cuando comenzó la serie, pensó que podría convertirse en un éxito?
Y.U.: Bueno, de hecho no la comencé pensando en si podría tener éxito o no, pero me esforcé mucho en ello.

Hay gente que critica su obra y dice que, comparada, por ejemplo, con Dragon Ball, está… ¿Cómo lo diríamos…?
Y.U.: ¿Mal dibujada? Sí, es verdad, lo reconozco. A decir verdad, a mí me encanta Dragon Ball, y mientras hago mi trabajo de dibujante, muchas veces me pongo a mirar las aventuras de Goku para ir aprendiendo a dibujar mejor (risas).

¿Trabaja con ayudantes? Su parodia en la serie Shin-chan, el dibujante Usuto Yoshii, tiene a su mujer que le ayuda… ¿Su caso es el mismo?
Y.U.: No, yo trabajo completamente solo… Y mi mujer no me ayuda (risas).

¿Cree que Shin-chan es un cómic o una serie de dibujos animados para niños?
Y.U.: En absoluto. Esta serie la pensé como una serie exclusivamente para adultos. Y por lo tanto, encuentro normal y comprensible que los padres no quieran dejar que sus hijos la vean.

Pero de hecho, en la televisión japonesa la serie se pasa los viernes por la tarde, justo cuando acaba Doraemon… Siendo así, es inevitable que los niños la miren, ¿verdad?
Y.U.: Sí, acaban mirándola… No creo que sea lo más apropiado, la verdad. Yo les dije a los de la cadena de televisión que la serie estaba enfocada para los adultos, pero ellos me dijeron que no les importaba, que la emitirían en aquella franja de todos modos…

Usted empezó la serie pensando exclusivamente en el público japonés, y por lo tanto, Shin-chan està repleto de referencias a la cultura nipona. ¿Qué opina, que la serie haya traspasado ahora las fronteras de Japón?
Y.U.: Pues la verdad, me preocupa el hecho que no la entiendan… Creo que el trabajo del traductor es fundamental en este aspecto, porque tiene que trabajar más de la cuenta para adaptar bromas y situaciones y para aclarar lo mejor posible los puntos de la cultura japonesa que serían en principio difíciles de entender para los extranjeros.

Muchas gracias por apreciar nuestro trabajo… La verdad es que traducir la serie es realmente difícil por el hecho de tener que reinventar bromas. Siempre intentamos ponernos en su piel y pensamos: “Si el Sr. Usui fuese catalán, en esta situación diría tal o cual cosa”. ¿Qué piensa de que sus bromas sean cambiadas y reinventadas, a veces casi totalmente? Porque las bromas que ponemos en la versión catalana a veces no tienen ninguna relación con el original…
Y.U.: Me parece perfecto. Os animo a continuar así, creo que el éxito que tiene Shin-chan en Cataluña es en gran parte gracias a vuestro trabajo. Si no se adaptasen bien las bromas, la serie perdería gracia y acabaría haciéndose aburrida. ¡Tenéis luz verde para continuar adaptando e inventando!

¡Muchas gracias por la confianza! Bien, cambiado de tema, ¿qué opina del éxito abrumador que está teniendo Shin-chan en Cataluña?
Y.U.: No me lo puedo creer… Bien, el hecho que se pueda ver Shin-chan en un lugar tan lejano de Japón como es Cataluña es… Bueno, increíble…

¿Qué opina de la chica que hace la voz de Shin-chan en la versión japonesa, Akiko Yajima? Se trata de una voz grave, muy poco de niño pequeño, al contrario que la versión catalana. Cuando dibujó a Shin-chan, ¿se lo imaginaba con la voz grave de Akiko Yajima o con la voz más infantil de Cristina Mauri, la actriz catalana que pone la voz a Shin-chan?
Y.U.: Bueno, a decir verdad nunca me había imaginado qué voz tendría Shin-chan. Me gusta mucho la voz que le ha puesto Akiko Yajima, creo que es una actriz de doblaje excelente. Sobre la versión catalana no te puedo decir nada porque todavía no la he visto.

En Cataluña hay muchas voces que dicen que Shin-chan no es un programa adecuado para los niños, y se ha iniciado un debate sobre la educación de los propios hijos y el papel y la responsabilidad de la televisión… La televisión no es un canguro, no es un parking para los niños pequeños, y son los padres los que se tienen que responsabilizar de la educación de sus hijos. ¿Qué opinión tiene sobre esto?
Y.U.: Bien, está claro, como te he dicho antes, que Shin-chan no es en absoluto una serie para niños pequeños. Así que recomiendo a los padres que les preocupe la idea de que sus hijos vean la serie que simplemente no se la dejen ver. La cadena de televisión no tiene nada que ver en esto porque ellos se limitan a emitir la serie. Los padres más preocupados tendrían que ser responsables y no dejar que sus hijos la vean.

En cierto programa se llegó a afirmar que los japoneses no tienen sentido del humor. ¿Qué opina de esto?
Y.U.: Bueno, tanto como que no tenemos… Lo que sí que reconozco es que nuestro humor no es ni de lejos tan refinado como el de otros pueblos del mundo, y mucho menos el mío (risas).

Bien, hablemos del futuro… ¿Hasta cuándo piensa continuar con Shin-chan? ¿Está cansado de dibujar la serie?
Y.U.: Mmm… No tengo ni idea, podría ser que la acabe tanto el próximo mes como dentro de unos años, la verdad es que no me lo he planteado. Y sí, a veces me siento ya cansado de la serie…

¿Tiene algún proyecto futuro? ¿Alguna cosa que le gustaría hacer, después de Shin-chan?
Y.U.: Ni uno, nada de nada. Incluso es posible que deje el mundo del cómic, quién sabe…

¡Hombre, no diga esto! A usted le gusta dibujar cómics, ¿no?
Y.U.: Mmm… No lo sé, tú… A veces te quemas tanto y estás tan cansado que lo aburres…

En la serie hemos visto que Shin-chan ha viajado varias veces, a Guam o a Hokkaidô… Le gustaría escribir una historia en la que Shin-chan y familia van a Barcelona, por ejemplo?
Y.U.: ¡Ya lo creo que sí! Me encantaría hacerlo, de veras… Quién sabe, tal vez en un futuro…

Bien, pues aquí acaba la entrevista. Muchísimas gracias por su tiempo. Por cierto, ¿le gusta el pimiento?
Y.U.: (risas) ¡Sí que me gusta! Sobretodo el que preparan en los bares de pinchitosde pollo… ¡Ah, y gracias a tí! Lo he pasado muy bien. ¡Muchos saludos a todos los lectores y espectadores catalanes de Shin-chan!

Traducción: Ingrid Mesado, Viviana Gorgollón y Josep Sadurní. 2002-04-14

Visita a la editorial Futabasha

Monday, September 28th, 2009

La verdad es que me estaba guardando la redacción de esta entrada para más adelante, dentro de mi serie dedicada a los museos y lugares curiosos dedicados al manga en Japón. Pero tras el triste destino que tuvo Yoshito Usui, he pensado que estaría mejor sacar ahora esta “pieza de artillería” que me guardaba, enmarcándola dentro de lo que sería esta semana de homenaje al fallecido autor de Shin Chan.

El edificio de Futabasha

El edificio de Futabasha. He chorizado la foto de Panoramio porque no atiné a sacar una yo. ¡Qué burro!

Y es que la editorial Futabasha es la que edita los cómics y demás libros relacionados con Shin Chan que están a la venta en Japón, desde los 49 tomos de la serie en sí hasta los distintos “refritos” de la misma en forma de “especiales” (recopilando por ejemplo las mejores historias en las que Nevado tiene un papel especial, o el abuelo, o lo que sea) o versiones en baja calidad para venderlas en las tiendas 24 horas, versiones en formato bolsillo, o incluso libros educativos (Shin Chan te enseña historia del mundo, o matemáticas, geografía, etcétera…), hasta libros relacionados con las películas o los videojuegos del personaje. Esta es la web  dentro de Futabasha dedicada únicamente a los libros relacionados con el personaje, mientras que este es el site del personaje en el que se engloba un poco todo lo que hay alrededor suyo: los libros, el anime, las películas, los videojuegos, etcétera.

La editorial Futabasha se encuentra en el corazón mismo de Tokio (aquí), a unos 15 minutos a pie de la estación de Iidabashi y bastante cerca de la adorable zona tradicional de Kagurazaka (lugar en el que merece la pena perderse una tarde; es un poco lo más cercano a Kioto que hay en Tokio). Por fuera no es más que un edificio más, del montón, como tantos otros que hay en Tokio.

Una editorial es realmente como una oficina más (clic para ampliar)
Una editorial es realmente como una oficina más (clic para ampliar)

Las fotos que acompañan a este artículo las tomé el año 2008 porque en un momento dado tuve la idea de intentar hacer un artículo bastante currado sobre el mundo del manga para ver si podía interesar a alguna revista o periódico. Así, mi intención era visitar una o dos editoriales, entrevistar a algunos editores y autores, etcétera. En definitiva, romper un poco la “barrera” que nos separa a los aficionados al manga del público en general y tratar de dar una visión real sobre lo que es el manga y lo que representa, intentando derrumbar algunos tópicos en el proceso. Al final, la falta de tiempo me impidió redactar el artículo y mucho menos, claro, intentar encontrar una revista que lo publicara, así que estas fotos habían quedado inéditas hasta ahora mismo.

No era la primera vez que iba a Futabasha; ya había estado en el año 2003 con el equipo de TV3 que acompañó a los ganadores del Megaconcurs de aquel año y alguna vez había acudido el Sr. Tooru Masuo, antiguo editor-supervisor de Yoshito Usui para Shin Chan, a alguna cena que habíamos tenido con el autor. Así, decidí llamarle para ver si me podía ayudar con este tema, a lo que él accedió encantado. Por cierto, si os lo preguntabais, sí, Tooru Masuo es el mismo que aparece en el manga de Shin Chan con su propio nombre, el editor de Usuto Yoshii que “es buen chico, aunque a simple vista no lo parezca”. XDDD

Uno de los múltiples cameos de Masuo (derecha) en Shin Chan

Uno de los múltiples cameos de Masuo (derecha) en Shin Chan

Muchos os habréis preguntado alguna vez cómo es una editorial japonesa de manga por dentro. Seguro que os la imagináis como un lugar divertido, lleno de monigotes por todas partes y tal. En realidad, las editoriales son básicamente todas iguales (bueno, al menos puedo hablar por tres o cuatro en las que he estado): un montón de mesas juntadas en grupo, con el jefe en cabeza mirando a su equipo -como en cualquier oficina japonesa, por otra parte-, y, eso sí, todas las mesas y rincones llenos de papelajos y trastos por todos los lados, tanto que hasta sorprende que quede espacio para un ordenador o incluso para meter los pies entre tanto fichero y archivo y papelajo que acaban guardando debajo de la mesa porque simplemente no hay más sitio.

Arriba: abarrote total / Abajo: monigotes y Tooru Masuo-san (clic para ampliar)

Arriba: abarrote total / Abajo: monigotes y Tooru Masuo-san de verdad (clic para ampliar)

Futabasha es una editorial generalista, es decir, no solo edita cómics. Creo recordar que tiene unas cinco plantas, y cada planta se organiza por secciones. Por ejemplo, en una planta están todos los que editan revistas generalistas, en otra los de cómics, en otra los de novelas y libros en general, etcétera. La particularidad de Futabasha es que es una editorial que pone mucho énfasis en el sector erótico, es decir, libros y revistas (y también cómics) de tipo erótico o directamente pornográfico. Como mínimo una planta (creo que eran dos, pero no lo recuerdo) está íntegramente reservada para los editores que trabajan en este campo, con pósters y revistas guarras por todas partes. Casi nada…

Durante esta visita del año pasado conocí a Ken’ichi Suzuki, actual supervisor-editor de Shin Chan después de que Masuo fuera promocionado a redactor jefe de la revista Manga Town. Por cierto, el Sr. Suzuki también aparece en el manga de Shin Chan, solo que lógicamente lo hace en los tomos más recientes. Él me enseñó in situ cómo trabajan los dibujantes y los editores de manga, algo que seguramente ya sabéis pero que de todos modos voy a explicar, ya que estoy con este artículo y tengo algunas fotos ilustrativas.

Más imágenes de la editorial por dentro (clic para ampliar)

Más imágenes de la editorial por dentro (clic para ampliar)

Primero, el editor se suele reunir con el autor para discutir cómo evolucionará la serie, qué historia van a hacer, etcétera. Estas reuniones es bastante normal que se realicen en restaurantes de los llamados “familiares” (famiresu, contracción niponera de “family restaurant”), que en general abren las 24 horas del día, están muy bien de precio y son bastante cómodos y realmente prácticos para “refugiarte” o tomarte un descanso mientras de paso te tomas desde unos espaguetis a un café. Después, el dibujante vuelve a su casa o estudio (generalmente trabajan en su casa o se han montado su estudio en su casa) y trabaja en lo que ellos llaman el “neemu” (no sé de dónde proviene esta palabra, parece del inglés “name”, pero no sé), que básicamente es poner sobre el papel la disposición de viñetas y el texto aproximado para cada página, acompañado de unos monigotes feos mal dibujados que representan ser los personajes. Para que os hagáis a la idea, es más o menos el equivalente a los “storyboard” del cine.

Un neemu: este está MUY elaborado para lo que es habitual (clic para ampliar)

Un neemu: este está MUY elaborado para lo que es habitual (clic para ampliar)

Este “neemu” se manda generalmente por fax a la editorial para que el editor introduzca o sugiera los cambios que le parezcan. Por si no ha quedado claro hasta ahora, el editor es el gran olvidado de la industria del manga, y muchas veces prácticamente el editor acaba siendo parte fundamental en el éxito o fracaso de una obra, convirtiéndose en ocasiones en casi el guionista, aunque casi nunca sale acreditado (Naoki Urasawa fue quizás de los primeros en hacerlo, acreditando a su editor –actual mánager– Takashi Nagasaki en sus obras).

Una vez corregido el “neemu”, ya todo está en manos del dibujante, que debe esforzarse por acabar la entrega en el plazo de tiempo determinado, que generalmente es tremendamente justo y por lo tanto los dibujantes suelen trabajar mil horas y pasarse noches en vela por culpa de eso. Es en este momento cuando entran en escena los ayudantes de los mangaka, que se encargan normalmente de dibujar los fondos, poner las tramas, pintar las partes negras, corregir cositas y eso. En el caso de Yoshito Usui, al ser el suyo un estilo muy simple y sin tramas ni fondos detallados ni nada, había trabajado siempre solo excepto en los últimos tiempos, cuando sus hijas empezaron a ayudarle.

El editor compara el neemu (derecha) con la página finalizada (izquierda) (clic para ampliar)
El editor compara el neemu (derecha) con la página finalizada (izquierda) para ver si hay cambios o errores (clic para ampliar)

Una vez está lista la entrega, normalmente es el editor el que se desplaza hasta la casa o estudio del autor para recogerlas, cuando no está allí desde horas antes esperando ansioso a que termine para, una vez recogidas las páginas, correr a la editorial para comprobar que todo está en orden, mandar a rotular los textos y enviarlo todo a la imprenta para que la revista pueda salir a tiempo.

Hablando de rotulación, me quedé anonadado cuando, en el año 2003, cuando visité Futabasha por primera vez, vi que aún rotulaban los cómics a mano. Es decir, escribiendo a máquina los textos (con una especie de curioso Dymo), recortándolos del papel y pegándolos con precisión milimétrica dentro de los bocadillos con la ayuda de cola y unas pinzas. ¡En pleno siglo XXI, y aún lo hacían a mano! No podía salir de mi asombro. Cuando volví en 2008, sin embargo, me dijeron que ahora de la rotulación se encargan estudios especializados externos y que lo hacen por ordenador, exactamente igual que como rotulan aquí en España los profesionales del sector. Menos mal… De nuevo, Japón, pese a su fama evidente como país tecnológico, demostraba anacronismos realmente increíbles e impensables.

Monigotes de Shin Chan, el personaje estrella de Futabasha, en un rincón (clic para ampliar)

Monigotes de Shin Chan, el personaje estrella de Futabasha, en un rincón (clic para ampliar)

Esta, pues, es la editorial que publica Shin Chan desde el primer día, y algunos de los profesionales que están detrás del éxito de esta serie, lo cual me parece también un justo homenaje, no solo al malogrado Yoshito Usui, sino también al gran equipo profesional que había detrás de él. ¿Os ha gustado la visita? ¿Os esperabais que las editoriales de manga fueran así?